La naturaleza nos sorprende gratamente con maravillas en rocas y piedras preciosas.
Piedras que valen unos cientos de miles o incluso millones de dólares y que para formarse requirieron de millones de años, altas presiones y condiciones específicas para llegar a las joyas que usamos.
Entre esas magnificencias se encuentra el diamante azul, el epítome de estos minerales, con un color profundo que recuerda el mar.
Los diamantes azules son raros, lo que los hace extremadamente valiosos. Su atractivo color azulado es el resultado de la presencia de boro en su composición.
Por lo demás, esta roca comparte propiedades con el resto de diamantes, pero es el boro el elemento que le permite absorber luz roja y que, tras un proceso, hace que la gema tenga esta tonalidad atractiva y exquisita.
Esta variedad de diamante es relativamente nueva, al menos para los expertos. Hasta hace poco, los diamantes azules eran un misterio para la comunidad científica.
Algunos hallazgos hechos en el 2018 dieron luz en la oscuridad para los geólogos y se aseveró que estas gemas azules eran diamantes.
De modo que los diamantes azules se cristalizaron en la profundidad de la tierra y hay algunas teorías que manejan la hipótesis de que los átomos de boro presentes en ellos, pueden ser una derivación del origen de los océanos más milenarios del planeta. Aunque son diamantes (porque tienen la misma base de carbono), no son iguales a las otras variedades (como el diamante amarillo o el diamante rojo).
En cuanto a sus propiedades, los diamantes azules son duros, tienen un 10 en la escala de Mohs y son capaces de soportar presión extrema.
Su formación natural se da en las profundidades de los cratones continentales, pero han llegado a las capas menos profundas por erupciones volcánicas u otros eventos. La variedad azul, es rara y pertenece a la clasificación fantasía de la GIA.
Los diamantes son las gemas que por predilección se usan para declarar amor eterno. También son un sinónimo de lujo, riqueza y poder.
En el caso de los azules, sí que se requieren altas sumas de dinero para hacerse con uno de ellos, sobre todo si se trata de una pieza natural. El quilate tiene un precio superior al millón de dólares. El valor en estas rocas varía según la intensidad y distribución uniforme del color.
Si buscas un diamante "barato" puedes acudir a los diamantes creados en laboratorios, con precios más asequibles. O, si los buscar verdadero, hay algunas tonalidades como como los azules verdosos y azules grisáceos que tienen un precio menor.
En cuanto a sus yacimientos, no hay minas específicas donde se puedan extraer con seguridad, son una especie de suerte mística, no aparecen de continuo. Los más famosos que se conocen en la actualidad vienen de minas en la India, Sudáfrica y Australia occidental.
En Golconda (India) se han sacado los más impresionantes, como el Hope Diamond y el Diamond Wittelsbash-Graff.
Como fragmentos de estrellas caídas o lágrimas derramadas por los mismos dioses, las distintas sociedades le han atribuido a los diamantes extraños orígenes para explicar su belleza, que en el caso de los azules se representan con algunos ejemplares de élite.
Famoso diamante que perteneció a Isabel de Farnesio, segunda esposa del rey Felipe V. Esta piedra monárquica, original de las Islas Filipinas, tiene una gran historia.
Es una joya divina y antigua, se tiene registro de esta pieza desde 1653. Es una gema atractiva que forma parte de la Smithsonian Institution. Su fama es mundial, atribuida a sus propiedades, color y a su exorbitante precio de entre 250 y 300 millones de dólares. También es conocido como Le Bijou du Roi, su tono es intenso y es de 45,52 quilates.
A diferencia del anterior, este diamante fue recientemente descubierto. Apareció en una mina en Sudáfrica en el año 2021. Ha sido descrito como extraordinariamente raro y sin defectos, con 15,10 quilates. Fue subastado por Sotheby's por un precio de 57.471.960 millones de dólares.
Con un peso de 14,62 quilates, este diamante azul tiene el título de ser el diamante (azul) más caro vendido en una subasta. En el año 2016 fue subastado por encima del Beers Cullinan Blue.
Otro diamante famoso por su intensidad de color, talla y belleza excepcional es el Luna azul de Josephine. una gema de 12 quilates con forma de almohadilla y clasificado como Fancy Vivid. Se vendió en el 2015 mediante una subasta por 48.4 millones de dólares.